Salvador Allende
26 de julio de 1908
Nace en Santiago de Chile,
político y presidente
constitucional de Chile
desde 1970 hasta el golpe de estado de 1973
"Colocado en un tránsito histórico,
pagaré con mi vida la lealtad al pueblo"
Por valija diplomática llegan los verdes billetes
que financian huelgas y sabotajes y cataratas de mentiras
Los empresarios paralizan a Chile y le niegan alimentos
No hay más mercado que el mercado negro
Largas colas hace la gente en busca
de un paquete de cigarrillos o un kilo de azúcar;
conseguir carne o aceite
requiere un milagro de la Virgen María Santísima
La Democracia Cristiana
y el diario «El Mercurio»
dicen pestes del gobierno y exigen a gritos
el cuartelazo redentor,
que ya es hora de acabar con esta tiranía roja;
les hacen eco otros diarios,
revistas, radios y canales de televisión
En estos tiempos difíciles,
los trabajadores están descubriendo los secretos de la economía
Están aprendiendo que no es imposible producir sin patrones,
ni abastecerse sin mercaderes
Pero la multitud obrera marcha sin armas,
vacías las manos, por este camino de su libertad
Desde el horizonte vienen
unos cuantos buques de guerra de los EEUU,
y se exhiben ante las costas chilenas
Y el golpe militar, tan anunciado, ocurre
Le gusta la buena vida
Varias veces ha dicho que no tiene pasta
de apóstol ni condiciones para mártir
Pero también ha dicho que vale la pena morir
por todo aquello sin lo cual no vale la pena vivir
Los generales alzados le exigen la renuncia
Le ofrecen un avión para que se vaya de Chile
Le advierten que el palacio presidencial será bombardeado por tierra y aire
Junto a un puñado de hombres,
Salvador Allende
escucha las noticias
Los militares se han apoderado de todo el país
Allende se pone un casco y prepara su fusil
Resuena el estruendo de las primeras bombas
El presidente habla por radio, por última vez:
Yo no voy a renunciar...
Una gran nube negra se eleva desde el palacio en llamas
El presidente Allende muere en su sitio
Los militares matan de a miles por todo Chile
El Registro Civil no anota las defunciones,
porque no caben en los libros,
pero el general Tomás Opazo Santander afirma
que las víctimas no suman más que el 0,01 por 100 de la población,
lo que no es un alto costo social
El director de la CIA, William Colby,
explica en Washington que gracias a los fusilamientos
Chile está evitando una guerra civil
Suena música marcial
sobre un fondo de explosiones y metralla:
las radios emiten bandos y proclamas
que prometen más sangre
El poeta Pablo Neruda,
moribundo, pide noticias del terror
De a ratos consigue dormir y dormido delira
La vigilia y el sueño son una única pesadilla
Desde que escuchó por radio
las palabras de Salvador Allende,
su digno adiós, el poeta ha entrado en agonía
Eduardo Galeano - Memoria del Fuego 3
HOMENAJE
espacio abierto
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