El nacimiento
El hospital público,
ubicado en un barrio de Río de Janeiro,
atendía a mil pacientes por día
Eran, casi todos, pobres o pobrísimos
Un médico de guardia contó a Juan Bedoian:
-La semana pasada, tuve que elegir
entre dos nenas recién nacidas
-La semana pasada, tuve que elegir
entre dos nenas recién nacidas
Aquí hay un solo respirador artificial
Ellas llegaron al mismo tiempo, ya moribundas,
y yo tuve que decidir cuál iba a vivir
Yo no soy quién, pensó el médico: que decida Dios
Pero Dios no dijo nada
Eligiera a quien eligiera,
el médico iba a cometer un crimen
Si no hacía nada, cometía dos
No había tiempo para la duda
Las nenas estaban en las últimas,
ya yéndose de este mundo
El médico cerró los ojos
Una fue condenada a morir,
y la otra fue condenada a vivir
Eduardo Galeano
El otro nacimiento
¿por qué yo?
2 de julio de 1976
David Feldman
Se resistió, le dispararon,
cayó, esta desaparecido
17 de agosto de 1976
Se resistió, le dispararon,
cayó, esta vivo
21 de octubre de 1976
Orlando Reneé Méndez (Toto)
Se resistió, le dispararon,
cayó, esta desaparecido
Entre siempre y jamás
de acuerdo
pero en tanto
que un siempre abre un futuro
y un jamás se hace un abismo
mi siempre puede ser
jamás de otros tantos
siempre es una meseta
con borde con final
jamás es una oscura
caverna de imposibles
y sin embargo a veces
nos ayuda un indicio
que cada siempre lleva
su hueso de jamás
que los jamases tienen
arrebatos de siempres
así
incansablemente
insobornablemente
entre siempre y jamás
fluye la vida insomne
pasan los grandes ojos
abiertos de la vida
Mario Benedetti
espacio abierto
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