"La recuperación económica
en un contexto externo favorable
y la
implementación de medidas
de alto impacto distributivo
permitieron
lograr mejoras significativas
en los indicadores de desigualdad
durante
el período 2003-2012"
La cita no pertenece a ningún funcionario
de la
administración nacional ni economista afín
a las posiciones del
kirchnerismo
Es el comienzo del informe
"La desigualdad en Argentina,
2003-2012"
elaborado por la
Fundación Pensar
usina de ideas del PRO,
cuyo presidente honorario
no es otro que
Mauricio Macri
La Fundación Pensar
elaboró un trabajo sobre desigualdad
en la región que tiene a
Argentina y Venezuela
como principales exponentes de la mejora en el ingreso
y a Brasil, Chile, Uruguay, Perú y Colombia
más rezagados
El informe de la ONG del PRO
que desmiente a los funcionarios del PRO
"La caída en la desigualdad de los ingresos laborales
"La caída en la desigualdad de los ingresos laborales
explicaría entre 67% y 80% de la disminución de la desigualdad en el país
El resto se debe principalmente a las medidas adoptadas
en el campo jubilatorio y a políticas de soporte de ingresos (como la AUH)"
sigue el texto, y compara estas mejoras con las de otros países de la región,
aunque aclara:
"Hoy, Argentina tiene una distribución relativamente más igualitaria
que otros países de la región, pero con una estructura social
lejos de la de países industrializados"
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"hacia el futuro, el actual modelo presenta debilidades
para mantener un crecimiento con equidad"
y enumera:
"El pobre desempeño del mercado laboral desde 2008;
la ausencia de un proceso de desconcentración de la riqueza;
la dudosa legitimidad jurídica de ciertas medidas jubilatorias;
el deterioro paulatino de la infraestructura y de los servicios públicos;
y un sistema de educación pública con serias falencias
a pesar de los cuantiosos recursos"
No obstante, y contrario a lo que suelen
No obstante, y contrario a lo que suelen
declarar los funcionarios del PRO,
el informe destaca que Argentina y Venezuela
son los dos países líderes de la región en materia de lucha
contra la desigualdad, y que los países que son tomados
como ejemplo de modelo económico por el macrismo
-Brasil, Chile, Uruguay, Perú y Colombia-
quedan más rezagados
"La comparación internacional coloca a nuestro país
más cerca del promedio latinoamericano que del mundo desarrollado
no sólo en términos de ingreso per cápita sino también de estructura social
Esto contrasta fuertemente con lo que sucedía tres o cuatro décadas atrás,
cuando Argentina era considerada una excepción dentro de una región
históricamente signada por profundas y persistentes desigualdades socioeconómicas"
señala el texto, con el detalle de que en esa brecha
se dieron dos escenarios muy diferentes en materia económica:
hace 40 años, en 1973, el país se acercaba al "fifty-fifty" del gobierno peronista
y hace 30 concluía la dictadura que instauró el liberalismo económico,
destruyó la industria nacional y aumentó la deuda externa
El "think-tank" del PRO da una curiosa justificación al respecto:
El "think-tank" del PRO da una curiosa justificación al respecto:
"A pesar de los conflictos y la violencia característicos de la época,
a mediados de la década de 1970 la sociedad argentina
era relativamente igualitaria en términos socioeconómicos,
con niveles de pobreza bajos en comparación con otros países
de América Latina y una clase media extendida"
En base a datos de del Centro de Estudios Distributivos,
Laborales y Sociales de la Universidad Nacional de La Plata (CEDLAS)
y el Banco Mundial en base a la Encuesta Permanente de Hogares (EPH),
el texto destaca que
"en 1974 el ingreso familiar per cápita del 10% más rico de la población
equivalía a 9,5 veces aquel del 10% más pobre"
y que "a partir de entonces la desigualdad económica
fue aumentando de manera casi ininterrumpida
hasta alcanzar su punto máximo en 2001"
En el apartado
En el apartado
"Argentina en la comparación internacional",
sostiene que el país
"más allá de los avances recientes,
mantiene un nivel de desigualdad muy elevado si se lo compara
con el de países desarrollados"
pero admite que
"tiene una distribución relativamente
más igualitaria que otros de América Latina"
"Las mejoras se han dado en casi todos
los países de la región, independientemente
de la filiación política del partido gobernante,
abarcando tanto a regímenes que analistas políticos clasifican como de
'izquierda populista' (Argentina, Bolivia, Ecuador y Venezuela)
como a las 'socialdemocracias' (Brasil, Chile y Uruguay)
y a movimientos más ligados a la centroderecha (Perú)"
indica el informe y admite, contra lo que suelen declarar
funcionarios del macrismo, que,
"según las estadísticas relevadas por CEDLAS,
países con gobiernos “populistas” habrían obtenido
reducciones de mayor magnitud en los coeficientes
de desigualdad durante el período 2000-2011"
No obstante, aclara que
No obstante, aclara que
"Chile, Brasil Perú y Uruguay lograron mejorar sus indicadores sociales
sin generar desequilibrios a nivel macroeconómico
como en el caso de Argentina y Venezuela"
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